Desde su apertura, Media Ración se ha consolidado como referente para disfrutar en la capital de la mejor materia prima, de la cocina fiel a la tradición y de una completa propuesta de vinos.

El espacio recupera, desde su nacimiento, las porciones típicas de la restauración madrileña, a las que hace honor su nombre, y rinde homenaje a las barras ilustradas de la capital, con una de las propuestas más auténticas de la zona ejecutadas con maestría por el chef Antonio del Álamo.

Cuenllas es uno de los clásicos de la gastronomía madrileña desde su local en la Calle Ferraz en el que Pepita, viuda de Cuenllas, decidió abrir su pequeña mantequería en 1939. El modesto negocio fue adaptándose a las necesidades de las posteriores generaciones de vecinos creciendo hasta convertirse en punto de peregrinaje para quienes buscan deleitarse con los más célebres productos gourmet.

Se continúa con la apuesta por las medias raciones, protagonistas del restaurante y pensadas para compartir (o no), a las que se incorporan nuevos platos de temporada, que se suman a clásicos como la Menestra de verduras de temporada con jamón ibérico o la Raya escabechada.

Reivindican su sitio en la cocina platos como la Ensalada de manitas de cerdo, mollejas de ternera y carabinero, la Ensalada tibia de garbanzos y navajas, las Lentejas con morro y faisán o el Arroz con liebre y verduras, entre otros, y acompañados de fueras de carta seleccionados cada día.

La barra vuelve a cobrar protagonismo para reivindicar su lugar como una de las mejores de la zona con una completa propuesta para tapear, comer o cenar y siempre con la mejor bodega, otro emblema de la casa. Aquí la carta mantiene las mejores latas (destacando las Almejas blancas al natural de Broto, las Sardinillas Picantes de Real Conservera Española o las Sardinas a la brasa de Güeyu Mar) y  las opciones de la tienda (Salmón ahumado, Jamón Ibérico y Cecina de León, a los que se añade ahora el Morcón Cinco Jotas).

Además, ahora en la barra se pueden disfrutar platos clásicos de la carta del restaurante, por ejemplo el Arroz cremoso de trufa negra y setas o el Tuétano asado con crema de maíz y ensalada de berros. 

Los principales recuperan recetas clásicas de la gastronomía española como la Merluza a la romana, el Jarrete de cerdo asado y el Pollo de corral en pepitoria. Mantienen también uno de los grandes platos del restaurante: los Callos Cuenllas (desde 1987), que puede disfrutarse además con huevo frito y patatas.

Para poner el punto y aparte a una comida en Media Ración, se mantiene la oferta de quesos con una tabla que va cambiando y con los postres, disponibles en barra y sala, ahora con novedades: Tarta capuchina, Milhojas de crema y nata con almendra tostada o Fruta de temporada con sorbete de maracuyá.

Todas estas propuestas pueden ser maridadas con la amplia carta de vinos, especialmente seleccionada por Fernando Cuenllas (perteneciente a la tercera generación de la familia en el negocio) y su equipo, siempre atentos para ofrecer una carta original y diferente perfecta para descubrir nuevas referencias y regiones.